Notas de Prensa

Tres ingenieros de la Escuela de Ingeniería Metalúrgica y de la Escuela de Ingeniería de Materiales de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Trujillo han logrado con éxito elaborar bloques de construcción de fácil acceso utilizando pasivos ambientales como escombros de construcción, restos orgánicos del sector gastronómico y sedimentos de canales de riego.

 

El equipo está integrado por el Dr. Alexander Yushepy Vega Anticona del Departamento Académico de Ingeniería de Materiales, así como por el Mag. Aldo Róger Castillo Chung y el Ing. César Pol Arévalo Aranda, ambos del Departamento Académico de Ingeniería Metalúrgica. 

 

En reciente visita, donde participó el rector de la UNT, Dr. Carlos Alberto Vásquez Boyer y el director de Investigación y Ética, Dr. Juan Carlos Rodríguez Soto, este cuajado equipo de investigadores mostró el producto de estos meses de arduo trabajo.

 

Precisamente, el jefe del Laboratorio de Materiales Compuestos, Alexander Vega, informó que entre los residuos orgánicos usados destacan los que generan las pollerías, restaurantes, parrilladas, el terminal pesquero o el uso de sedimentos de los canales de Chavimochic.

 

“Todos estos residuos los sometemos a un método denominado Geopolimerización que nos ha permitido generar productos que pueden competir en igualdad de condiciones como los productos prefabricados de cemento”, expresó el investigador.

 

La geopolimerización es un proceso químico en el cual los residuos de construcción que normalmente ya no tienen propiedad química nosotros podemos volvérsela a dar y de esa manera pueden ser un reemplazo parcial o total del cemento. El color naranja del bloque producido en la UNT se debe al ladrillo de arcilla molido, que ha sido geopolimerizado y llevado a los talleres para ser convertido en productos nuevos.

 

Al mismo tiempo, el Laboratorio de Materiales Compuestos también desde hace unos meses viene desarrollando proyectos para usar materiales orgánicos como fibras vegetales, incorporándolas a termoestables y termoplásticos que permiten ofrecer productos biodegradables.

 

Entre las fibras vegetales de especies locales, regionales y nacionales que se vienen utilizando se puede mencionar a la Sansevieria trifasciata (conocida como lengua de suegra), pseudotallo de plátano, lino, entre otras.

 

Este último proyecto tiene como finalidad ofrecer una alternativa como reemplazo parcial o total a las fibras sintéticas como la denominada fibra de vidrio, ofreciendo en los proyectos mencionados respuestas a la demanda social en temas de reúso de pasivos ambientales y la posibilidad de uso de productos con el sello biodegradable.

 

El Dr. Alexander Vega refirió que el Laboratorio de Materiales Compuestos precisamente cuenta con los equipos que permiten realizar las caracterizaciones mecánicas, físicas y químicas a todos estos productos. “Estamos a la vanguardia y respondiendo a las necesidades que tiene la sociedad en términos de uso de los pasivos ambientales”, expresó.

 

Junto a este laboratorio también participan los laboratorios de procesamiento de materiales y el de materiales poliméricos.

 

En el caso del investigador Ing. Aldo Chung se mostró orgulloso de poder exhibir los ladrillos hechos con geopolimerización y las placas de plásticos reforzados con fibras naturales. “De esta manera estamos brindando una alternativa a los materiales tradicionales agregados como arena y cemento. Son una buena alternativa por su bajo costo. Este es un proyecto innovador que estamos lanzando, pues la UNT es una de las primeras en esta fabricación”, agregó.

 

Por su parte, el docente Mag. César Arévalo informó que esta propuesta ha permitido preparar artículos científicos a nivel de la base de datos Scopus y también se han preparado diversos papers. Además, se está gestionando la obtención de la patente mediante la Oficina de Innovación Tecnológica.

 

Finalmente, el Dr. Alexander Vega indicó que el laboratorio pretende ser el foco que permita el desarrollo de proyectos que incluyan la mayoría de residuos que tenemos en el sector industrial, minero, metalúrgico y agrícola. El equipo multidisciplinario permite abordar estos proyectos de manera conjunta.